Intrusismo profesional
El intrusismo profesional es una práctica de competencia desleal que perjudica tanto a multitud de actividades profesionales como al mercado en si por el fraude que conlleva.
También perjudica a la Agencia tributaria por la dificultad para regular fiscalmente una profesión no declarada, pero principalmente los mayores perjudicados son los clientes, ya que no van a encontrar las garantías debidas en el desarrollo del servicio profesional ejercido por el intruso, pudiendo llevarlos a situaciones de indefensión y vulneración de derechos.
El intruso está en una situación ilegal y ventajosa dado que actúa fuera de la supervisión de las organizaciones que ejercen las tareas de control y vigilancia de la profesión.
Esto hace que esté en el punto de mira de numerosas asociaciones y colegios profesionales.
Marco legal
El intrusismo profesional puede ser perseguido tanto civilmente mediante la ley de competencia desleal, como administrativamente por normas reglamentarias que regulan el ejercicio de determinadas profesiones u oficios, o penalmente en base a los tipos penales que censuran dicha práctica.
Por ello, la investigación estará centrada en recabar las pruebas pertinentes que demuestren que un intruso, está realizando la actividad sin ajustarse plenamente a la legalidad exigible. También se prestará especial atención a si los locales e instalaciones, destinados a tales actividades, se adecuan a la normativa vigente.
Para concluir, se dejará constancia en el informe de las gestiones realizadas y pruebas obtenidas, prestando especial atención a las irregularidades observadas con el fin de combatir el intrusismo y de cara a una posible ratificación judicial.
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